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<\/p>\n
Por Alejandro Franco –<\/strong> cont\u00e1ctenos<\/a><\/h2>\nAlgunos dicen que fue el mas agresivo Pony Car<\/em> de su generaci\u00f3n; otros, que fue el ultimo destello de genialidad de la empresa que lo cre\u00f3, antes de entrar en una aburrida meseta que la llevar\u00eda al cierre en 1987. Como sea, lo cierto es que el AMC Javelin<\/strong> era un auto al que le resultaba imposible pasar desapercibido; y sus a\u00f1os de esplendor marcaron el inicio de una \u00e9poca de esperanza para su fabricante, deseos que nunca terminaron de concretarse como es debido.<\/p>\nAires de cambio en la AMC<\/h2>\n
Corr\u00eda 1965 y la situaci\u00f3n de la American Motors Company<\/strong> no era lo que se dice brillante. La empresa se hab\u00eda hecho un nicho en el mercado de coches compactos y econ\u00f3micos, pero la exclusividad del sector comenz\u00f3 a resquebrajarse cuando, primero, ingres\u00f3 la Volkswagen<\/strong> y su modelo Beetle<\/a> y, despu\u00e9s, cuando los grandes de Detroit comenzaron a probar suerte con sus propios coches econ\u00f3micos, l\u00e9ase el Chevrolet Corvair<\/a> o el Ford Falcon<\/a>. Esto puso en p\u00e1nico a los directivos de la AMC<\/strong>, quienes vieron c\u00f3mo las ventas de su eternamente redituable Rambler<\/strong> comenzaron a bajar de manera irremediable. La administraci\u00f3n de la AMC<\/strong> entr\u00f3 en p\u00e1nico, y decidi\u00f3 diferenciarse, descuidando los coches econ\u00f3micos que siempre la hab\u00edan caracterizado, y embarc\u00e1ndose en una serie de modelos de lujo que nunca lograron convertirse en un \u00e9xito de ventas.<\/p>\n\n
Era obvio que la gerencia de la AMC<\/strong> carec\u00eda de gu\u00eda. All\u00ed es cuando entr\u00f3 a jugar su papel Robert “Bobby” Evans, un millonario que ven\u00eda del rubro maderero y que sent\u00eda que la American Motors<\/strong> ten\u00eda el potencial para salir de la sombra producida por los tres grandes de Detroit y convertirse en un gigante de la industria. Pero, para ello, se precisaba un gran \u00e9xito.<\/p>\nEl primer indicio de que hab\u00eda un nuevo mercado para la AMC<\/strong> lo di\u00f3 la presentaci\u00f3n del Ford Mustang<\/a> en 1964. La Ford<\/strong> arras\u00f3 en ventas durante los dos primeros a\u00f1os, con el Mustang<\/strong> solito sobrepasando en n\u00fameros a toda la producci\u00f3n combinada de la AMC<\/strong>. Hab\u00eda nacido el Pony Car<\/em>, el auto deportivo para la clase media y, sobre todo, para una generaci\u00f3n de treinta\u00f1eros que deseaban algo mas divertido que un simple coche familiar.<\/p>\nEn aquel momento el CEO de la AMC<\/strong> era Roy Abernethy, quien apur\u00f3 la marcha de un modesto deportivo como para hacerle frente a la avalancha desatada por el Mustang<\/a>. Pero el resultado final fue el Rambler Marlin<\/strong>, un auto demasiado feo y carente de personalidad como atraer multitudes. Se impon\u00eda un cambio, y por ello comenzaron a dise\u00f1ar prototipos. El mismo Evans – a cargo del directorio<\/em> – impuso la idea de crear un tour<\/em> con los modelos, de manera de generar expectativas y recoger el feedback<\/em> de la gente. La respuesta fue enormemente positiva – en especial, con las sugerencias de colores, pinturas y cromados para los nuevos coches<\/em> -, y todo ello se combin\u00f3 en los laboratorios de la AMC<\/strong>. As\u00ed fue como surgi\u00f3 el Javelin<\/strong> en 1967.<\/p>\nPero el nacimiento del Javelin<\/strong> no estuvo exento de problemas. El primero es que la AMC<\/strong> ven\u00eda dando n\u00fameros rojos desde hac\u00eda dos a\u00f1os, raz\u00f3n por la cual Evans decidi\u00f3 dar un golpe de estado, volteando al veterano Abernethy y elevando a otros funcionarios de carrera – como Roy Chapin<\/em> – a cargos directivos, gente que pensara como \u00e9l y que estuviera convencida que la empresa requer\u00eda un cambio de imagen de manera urgente. El otro era la necesidad de una agresiva campa\u00f1a de marketing, que se sacudiera de encima la idea de la AMC<\/strong> como productora de aburridos autos familiares, y que sedujera a adolescentes y jovenes adultos con la idea de inminentes y poderosos productos de la compa\u00f1\u00eda.<\/p>\nPero la AMC<\/strong> ten\u00eda recursos limitados y, lo que era peor, estaba vinculada a una conservadora agencia de publicidad de Nueva York. Desatando una tormenta de ideas<\/em>, los ejecutivos de la AMC<\/strong> llegaron a la conclusi\u00f3n que la mejor manera de fomentar al Javelin<\/strong> era meti\u00e9ndolo en las carreras, una actividad a la cual los grandes fabricantes – a excepci\u00f3n de la GM<\/strong><\/em> – sol\u00edan escapar, ya que representaba un constante drenaje de dinero. Y, para utilizar las competiciones como material publicitario, era necesario traer a creativos frescos de la publicidad. As\u00ed es como enrolaron – con sus limitados 12 millones de d\u00f3lares de presupuesto <\/em>– a la gente de la Wells, Rich, Greene, Inc.<\/strong>, los cuales ven\u00edan anotando varios goles de media cancha como el colorido rebranding<\/em> de la aerol\u00ednea Branniff<\/strong> y una exitosa campa\u00f1a que hab\u00eda resucitado a la l\u00ednea de digestivos Alka Seltzer<\/strong>.<\/p>\nDebuta el Javelin<\/h2>\n
El 31 de Agosto de 1967 el AMC Javelin<\/strong> fue presentado en sociedad. No era exactamente innovador – m\u00e1s para alguien que hubiera asistido al tour de prototipos que la AMC<\/strong> hab\u00eda montado un par de a\u00f1os antes<\/em> -, pero ten\u00eda atractivo y garra. Llegaba con dos a\u00f1os de atraso a la fiesta de los pony cars<\/em>, en donde ahora figuraba el Chevrolet Camaro<\/a> adem\u00e1s del l\u00edder del segmento, el cl\u00e1sico Ford Mustang<\/a>. Tanto Evans como Chaplin dibujaron n\u00fameros modestos en las proyecciones de ventas, las cuales fueron satisfechas antes de lo previsto… aunque los distribuidores AMC<\/strong> pronto demostraron su falta de experiencia en la venta de pony cars<\/em>.<\/p>\nEn s\u00ed, el Javelin<\/strong> estaba ok para su segmento, sin ser ciertamente una maravilla mec\u00e1nica. Sus frenos eran mediocres, consum\u00eda bastante combustible, ten\u00eda detalles de terminaci\u00f3n, y su visibilidad de manejo no era la mejor del mundo. Por contra, el Javelin<\/strong> era m\u00e1s c\u00f3modo que el resto de los pony cars<\/em> – pose\u00eda un ba\u00fal mas grande y cab\u00edan 4 a 5 personas c\u00f3modamente en su interior<\/em> -. El primero a\u00f1o se vendieron 55.000 Javelins, lo cual excedi\u00f3 en un 40% las expectativas de venta de la directiva, y quienes ordenaron expandir la l\u00ednea del modelo. As\u00ed fu\u00e9 como surgi\u00f3 el AMX<\/strong>, un Javelin<\/strong> recortado pensado para dos personas y con bastante potencia como para calificar como muscle car<\/em>.<\/p>\nPero los n\u00fameros comenzaron a mejorar cuando el Javelin<\/strong> entr\u00f3 en las carreras. No gan\u00f3 ninguna en la temporada 1968, pero termin\u00f3 segundo en seis de las doce competiciones, una perfomance excepcional si se consideran los limitados recursos de dinero y tiempo con los que cont\u00f3 la AMC<\/strong> para preparar su equipo.<\/p>\n\n
Lamentablemente 1969 marcar\u00eda el comienzo del declive del mercado de los pony cars<\/em>. El AMX<\/strong> – que comenz\u00f3 con 5.000 unidades<\/em> – subi\u00f3 a 8.000, pero el Javel\u00edn<\/strong> perdi\u00f3 el 20% de sus ventas. No era un fen\u00f3meno aislado: las ventas del Mustang <\/strong>cayeron tambi\u00e9n otro 20% ese mismo a\u00f1o, e incluso el Chevrolet Camaro<\/a> se derrumb\u00f3 un 30%. Para colmo, la perfomance de AMC<\/strong> en las carreras devino en desastre, principalmente porque el equipo de conductores fue seducido por otra marca y los pilotos que aparecieron para reemplazarlos carec\u00edan del talento necesario para obtener las victorias tan deseadas. Para 1970 las actuaciones del Javelin<\/strong> en las carreras distaban mucho de ser memorables, y se estaban convirtiendo en una fuga constante de dinero.<\/p>\nEn 1971 el Javelin<\/strong> recibi\u00f3 su mayor lavado de cara: un redise\u00f1o que lo acercaba al Mustang Mach 1<\/strong>. Un motor mejorado permiti\u00f3 que el auto obtuviera sus primeras victorias – y el campeonato<\/em> – en la categor\u00eda Trans Am<\/em> en ese mismo a\u00f1o. Pero dichas victorias supusieron el canto del cisne para la AMC<\/strong>: la gente de Trans Am<\/em> cambi\u00f3 las reglas y los Javelin<\/strong> quedaron fuera de los nuevos estandares impuestos. A esto se sum\u00f3 la crisis del petr\u00f3leo, la suba de precios del combustible, y las nuevas normas sobre emisi\u00f3n de gases. 1974 ser\u00eda el a\u00f1o final de producci\u00f3n del honorable Javelin<\/strong>, con cerca de 23.000 unidades vendidas, a las que se sumaron otras 5.000 de la edici\u00f3n final del AMX<\/strong>.<\/p>\nComo una flecha roja que deja su trazado en los vientos del tiempo, as\u00ed lo hizo el Javelin<\/strong>, un pony car <\/em>independiente que sali\u00f3 con modestia a hacerle frente a los deportivos de las grandes marcas y logr\u00f3 hacerse un hueco en la memoria de los fans, quienes contin\u00faan ador\u00e1ndolo como lo que es: una fiera dispuesta a pulverizar el pavimento bajo la potencia de su indomable motor V8.<\/p>\n![\"AMC](\"http:\/\/localhost\/autosdeculto2023\/wp-content\/uploads\/2017\/08\/foto-amc-javelin.webp\" "\\"AMC")
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AMC<\/h4>\nArticulos publicados en el portal sobre esta marca:\u00a0Historia del AMC Gremlin<\/a>\u00a0–\u00a0Historia del AMC Pacer\u00a0<\/a>–\u00a0Historia del AMC Javelin<\/a>\u00a0–\u00a0Historia del Nash Metropolitan (y los or\u00edgenes de la AMC)<\/a>\u00a0–\u00a0Historia de Rambler<\/a>\u00a0–\u00a0Historia del IKA Torino<\/a>\u00a0–\u00a0Los autos de James Bond (Parte II)<\/a>\u00a0–\u00a0<\/em>en\u00a0Selecci\u00f3n de Autos Argentinos del Ayer (III)<\/a>\u00a0hablamos de\u00a0los\u00a0Rambler Custom Classic \/ Cross Country \/ Ambassador\u00a0<\/strong>\u00a0producidos por\u00a0IKA<\/strong>\u00a0en nuestras pampas entre los a\u00f1os 60 y 70<\/em><\/h5>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"Autos clasicos: historia del AMC Javelin. Uno de los mas poderosos pony cars fabricado de manera independiente por la American Motors. Cronica del automovil<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":[],"aioseo_notices":[],"_links":{"self":[{"href":"http:\/\/localhost\/autosdeculto2023\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/5473"}],"collection":[{"href":"http:\/\/localhost\/autosdeculto2023\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"http:\/\/localhost\/autosdeculto2023\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/autosdeculto2023\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/autosdeculto2023\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=5473"}],"version-history":[{"count":1,"href":"http:\/\/localhost\/autosdeculto2023\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/5473\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":10889,"href":"http:\/\/localhost\/autosdeculto2023\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/5473\/revisions\/10889"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/localhost\/autosdeculto2023\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=5473"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}
Aires de cambio en la AMC<\/h2>\n
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La administraci\u00f3n de la AMC<\/strong> entr\u00f3 en p\u00e1nico, y decidi\u00f3 diferenciarse, descuidando los coches econ\u00f3micos que siempre la hab\u00edan caracterizado, y embarc\u00e1ndose en una serie de modelos de lujo que nunca lograron convertirse en un \u00e9xito de ventas.<\/p>\n \n Era obvio que la gerencia de la AMC<\/strong> carec\u00eda de gu\u00eda. All\u00ed es cuando entr\u00f3 a jugar su papel Robert “Bobby” Evans, un millonario que ven\u00eda del rubro maderero y que sent\u00eda que la American Motors<\/strong> ten\u00eda el potencial para salir de la sombra producida por los tres grandes de Detroit y convertirse en un gigante de la industria. Pero, para ello, se precisaba un gran \u00e9xito.<\/p>\n El primer indicio de que hab\u00eda un nuevo mercado para la AMC<\/strong> lo di\u00f3 la presentaci\u00f3n del Ford Mustang<\/a> en 1964. La Ford<\/strong> arras\u00f3 en ventas durante los dos primeros a\u00f1os, con el Mustang<\/strong> solito sobrepasando en n\u00fameros a toda la producci\u00f3n combinada de la AMC<\/strong>. Hab\u00eda nacido el Pony Car<\/em>, el auto deportivo para la clase media y, sobre todo, para una generaci\u00f3n de treinta\u00f1eros que deseaban algo mas divertido que un simple coche familiar.<\/p>\n En aquel momento el CEO de la AMC<\/strong> era Roy Abernethy, quien apur\u00f3 la marcha de un modesto deportivo como para hacerle frente a la avalancha desatada por el Mustang<\/a>. Pero el resultado final fue el Rambler Marlin<\/strong>, un auto demasiado feo y carente de personalidad como atraer multitudes. Se impon\u00eda un cambio, y por ello comenzaron a dise\u00f1ar prototipos. El mismo Evans – a cargo del directorio<\/em> – impuso la idea de crear un tour<\/em> con los modelos, de manera de generar expectativas y recoger el feedback<\/em> de la gente. La respuesta fue enormemente positiva – en especial, con las sugerencias de colores, pinturas y cromados para los nuevos coches<\/em> -, y todo ello se combin\u00f3 en los laboratorios de la AMC<\/strong>. As\u00ed fue como surgi\u00f3 el Javelin<\/strong> en 1967.<\/p>\n Pero el nacimiento del Javelin<\/strong> no estuvo exento de problemas. El primero es que la AMC<\/strong> ven\u00eda dando n\u00fameros rojos desde hac\u00eda dos a\u00f1os, raz\u00f3n por la cual Evans decidi\u00f3 dar un golpe de estado, volteando al veterano Abernethy y elevando a otros funcionarios de carrera – como Roy Chapin<\/em> – a cargos directivos, gente que pensara como \u00e9l y que estuviera convencida que la empresa requer\u00eda un cambio de imagen de manera urgente. El otro era la necesidad de una agresiva campa\u00f1a de marketing, que se sacudiera de encima la idea de la AMC<\/strong> como productora de aburridos autos familiares, y que sedujera a adolescentes y jovenes adultos con la idea de inminentes y poderosos productos de la compa\u00f1\u00eda.<\/p>\n Pero la AMC<\/strong> ten\u00eda recursos limitados y, lo que era peor, estaba vinculada a una conservadora agencia de publicidad de Nueva York. Desatando una tormenta de ideas<\/em>, los ejecutivos de la AMC<\/strong> llegaron a la conclusi\u00f3n que la mejor manera de fomentar al Javelin<\/strong> era meti\u00e9ndolo en las carreras, una actividad a la cual los grandes fabricantes – a excepci\u00f3n de la GM<\/strong><\/em> – sol\u00edan escapar, ya que representaba un constante drenaje de dinero. Y, para utilizar las competiciones como material publicitario, era necesario traer a creativos frescos de la publicidad. As\u00ed es como enrolaron – con sus limitados 12 millones de d\u00f3lares de presupuesto <\/em>– a la gente de la Wells, Rich, Greene, Inc.<\/strong>, los cuales ven\u00edan anotando varios goles de media cancha como el colorido rebranding<\/em> de la aerol\u00ednea Branniff<\/strong> y una exitosa campa\u00f1a que hab\u00eda resucitado a la l\u00ednea de digestivos Alka Seltzer<\/strong>.<\/p>\n El 31 de Agosto de 1967 el AMC Javelin<\/strong> fue presentado en sociedad. No era exactamente innovador – m\u00e1s para alguien que hubiera asistido al tour de prototipos que la AMC<\/strong> hab\u00eda montado un par de a\u00f1os antes<\/em> -, pero ten\u00eda atractivo y garra. Llegaba con dos a\u00f1os de atraso a la fiesta de los pony cars<\/em>, en donde ahora figuraba el Chevrolet Camaro<\/a> adem\u00e1s del l\u00edder del segmento, el cl\u00e1sico Ford Mustang<\/a>. Tanto Evans como Chaplin dibujaron n\u00fameros modestos en las proyecciones de ventas, las cuales fueron satisfechas antes de lo previsto… aunque los distribuidores AMC<\/strong> pronto demostraron su falta de experiencia en la venta de pony cars<\/em>.<\/p>\n En s\u00ed, el Javelin<\/strong> estaba ok para su segmento, sin ser ciertamente una maravilla mec\u00e1nica. Sus frenos eran mediocres, consum\u00eda bastante combustible, ten\u00eda detalles de terminaci\u00f3n, y su visibilidad de manejo no era la mejor del mundo. Por contra, el Javelin<\/strong> era m\u00e1s c\u00f3modo que el resto de los pony cars<\/em> – pose\u00eda un ba\u00fal mas grande y cab\u00edan 4 a 5 personas c\u00f3modamente en su interior<\/em> -. El primero a\u00f1o se vendieron 55.000 Javelins, lo cual excedi\u00f3 en un 40% las expectativas de venta de la directiva, y quienes ordenaron expandir la l\u00ednea del modelo. As\u00ed fu\u00e9 como surgi\u00f3 el AMX<\/strong>, un Javelin<\/strong> recortado pensado para dos personas y con bastante potencia como para calificar como muscle car<\/em>.<\/p>\n Pero los n\u00fameros comenzaron a mejorar cuando el Javelin<\/strong> entr\u00f3 en las carreras. No gan\u00f3 ninguna en la temporada 1968, pero termin\u00f3 segundo en seis de las doce competiciones, una perfomance excepcional si se consideran los limitados recursos de dinero y tiempo con los que cont\u00f3 la AMC<\/strong> para preparar su equipo.<\/p>\n \n Lamentablemente 1969 marcar\u00eda el comienzo del declive del mercado de los pony cars<\/em>. El AMX<\/strong> – que comenz\u00f3 con 5.000 unidades<\/em> – subi\u00f3 a 8.000, pero el Javel\u00edn<\/strong> perdi\u00f3 el 20% de sus ventas. No era un fen\u00f3meno aislado: las ventas del Mustang <\/strong>cayeron tambi\u00e9n otro 20% ese mismo a\u00f1o, e incluso el Chevrolet Camaro<\/a> se derrumb\u00f3 un 30%. Para colmo, la perfomance de AMC<\/strong> en las carreras devino en desastre, principalmente porque el equipo de conductores fue seducido por otra marca y los pilotos que aparecieron para reemplazarlos carec\u00edan del talento necesario para obtener las victorias tan deseadas. Para 1970 las actuaciones del Javelin<\/strong> en las carreras distaban mucho de ser memorables, y se estaban convirtiendo en una fuga constante de dinero.<\/p>\n En 1971 el Javelin<\/strong> recibi\u00f3 su mayor lavado de cara: un redise\u00f1o que lo acercaba al Mustang Mach 1<\/strong>. Un motor mejorado permiti\u00f3 que el auto obtuviera sus primeras victorias – y el campeonato<\/em> – en la categor\u00eda Trans Am<\/em> en ese mismo a\u00f1o. Pero dichas victorias supusieron el canto del cisne para la AMC<\/strong>: la gente de Trans Am<\/em> cambi\u00f3 las reglas y los Javelin<\/strong> quedaron fuera de los nuevos estandares impuestos. A esto se sum\u00f3 la crisis del petr\u00f3leo, la suba de precios del combustible, y las nuevas normas sobre emisi\u00f3n de gases. 1974 ser\u00eda el a\u00f1o final de producci\u00f3n del honorable Javelin<\/strong>, con cerca de 23.000 unidades vendidas, a las que se sumaron otras 5.000 de la edici\u00f3n final del AMX<\/strong>.<\/p>\n Como una flecha roja que deja su trazado en los vientos del tiempo, as\u00ed lo hizo el Javelin<\/strong>, un pony car <\/em>independiente que sali\u00f3 con modestia a hacerle frente a los deportivos de las grandes marcas y logr\u00f3 hacerse un hueco en la memoria de los fans, quienes contin\u00faan ador\u00e1ndolo como lo que es: una fiera dispuesta a pulverizar el pavimento bajo la potencia de su indomable motor V8.<\/p>\n Autos clasicos: historia del AMC Javelin. Uno de los mas poderosos pony cars fabricado de manera independiente por la American Motors. 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<\/p>\nAMC<\/h4>\n
Articulos publicados en el portal sobre esta marca:\u00a0Historia del AMC Gremlin<\/a>\u00a0–\u00a0Historia del AMC Pacer\u00a0<\/a>–\u00a0Historia del AMC Javelin<\/a>\u00a0–\u00a0Historia del Nash Metropolitan (y los or\u00edgenes de la AMC)<\/a>\u00a0–\u00a0Historia de Rambler<\/a>\u00a0–\u00a0Historia del IKA Torino<\/a>\u00a0–\u00a0Los autos de James Bond (Parte II)<\/a>\u00a0–\u00a0<\/em>en\u00a0Selecci\u00f3n de Autos Argentinos del Ayer (III)<\/a>\u00a0hablamos de\u00a0los\u00a0Rambler Custom Classic \/ Cross Country \/ Ambassador\u00a0<\/strong>\u00a0producidos por\u00a0IKA<\/strong>\u00a0en nuestras pampas entre los a\u00f1os 60 y 70<\/em><\/h5>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"